Un Triunvirato para Ferraz

Allá por el siglo I a.C. y fruto de la alianza de tres (trium-) hombres (vir), surge en la Antigua Roma una forma de gobierno ejercido por tres personas a la vez, el Triunvirato. Con César, Pompeyo y Craso se firma de manera tácita el primero y Octavio, Lépido y Marco Antonio conforman oficialmente el segundo. Envueltos entre inspiraciones y conspiraciones, el primero terminó con el asesinato de César y el segundo con el dominio absoluto de Augusto en el mundo romano. De la República al Imperio. Sea cuales fueren los motivos, lo cierto es que el afán de poder y dominio sobre el mundo terminaron con las alianzas preestablecidas, que se presuponían necesarias para consolidar el gobierno de las instituciones.

Lo que debió ser y no fue entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez

Toda la maquinaria preparada para el esperado maratón de ‘El Debate’ que, en principio, prometía. Citas y compromisos anulados para no perder detalle de las más de cinco horas que pasé delante del televisor. Y como yo, miles de confiados y escépticos, de fieles e indecisos, que, aunque les cueste reconocerlo, estaban expectantes. Tres cadenas de televisión, más de trescientos periodistas acreditados, asesores y consultores por doquier… todos pudimos comprobar la degeneración que está sufriendo la dialéctica en política.

Orgías de campaña

En la antigüedad clásica, cuya cultura ha fijado los cimientos de la civilización occidental, las bacanales eran fiestas en honor al dios Baco (Dioniso griego) en las que el protagonismo estaba copado por ‘los excesos’; de comida, de bebida, de sexo…, pero excesos. Fruto de dichos excesos, se producían conspiraciones políticas y crímenes tales que a finales del siglo II a.C. el Senado romano promulgó una ley para prohibir su celebración y restringir el culto divino a lo puramente sagrado.

Pactos de impacto

Pasados los 20 días que marca la ley electoral, este fin de semana han quedado constituidos los más de 8.000 ayuntamientos de toda España, no sin cierto asombro en la mayoría de los casos. El día 24 se produjo un cambio en el sistema político actual. Se habló de descalabro de unos, de batacazos de otros; de resurgir de aquellos y del emerger de estos otros. Y entre descalabros, batacazos, resurgir y emerger nos encontramos con un cambio de color en la panorámica nacional. Un nuevo mapa de reparto de poderes, muy distinto hasta lo que ahora teníamos y a lo que los electores han manifestado en las urnas.

¿Mensajes a flor de piel? De la epidermis a la hipodermis

Que la forma de hacer política ha cambiado, es un hecho más que evidente. Lejos quedan aquellas campañas en blanco y negro, en las que candidatos, afiliados y simpatizantes empapelaban las paredes y las calles de las ciudades con propaganda electoral. Los mítines multitudinarios fueron dando paso a las campañas televisivas y a los debates de La Clave. En estos 38 años de elecciones democráticas, nuevos partidos han ido surgiendo, nuevos candidatos, nuevas ideas… En definitiva, nuevas formas de hacer de política.